Pasear por Córdoba, ciudad de encuentro de culturas a lo largo del tiempo, es cómo hacer un recorrido por la historia, respirando arte, por sus calles, al igual que se respira el azahar de sus miles de naranjos.
La judería, la calle de las flores, la Mezquita, los Alcázares reales, el Palacio de Viana... son innumerables los edificios, plazas y jardines que te dejarán enamorado de la ciudad.
Pero aún hay algo mas importante de ésta ciudad, y es la hospitalidad y generosidad de su gente.
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